¿Qué es la biomasa? Ventajas y factores a tener en cuenta

Se prevé un incremento en la construcción de centrales de biomasa a corto plazo debido al aumento del precio de los combustibles fósiles y a la necesidad que tiene la industria de cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

Actualmente, la mayor parte de la demanda de energía térmica en la industria se satisface a través de combustibles fósiles. Por ello, la biomasa, al ser neutra en emisiones de CO2, es una clara opción para la industria en su ruta hacia la descarbonización.

Cada vez son más las empresas interesadas en conocer qué es la biomasa, cuáles son sus principales ventajas y qué factores hay que tener en cuenta.

1. ¿Qué es la Biomasa? 

La Directiva (UE) 2018/2001 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 11 de diciembre 2018, relativa al fomento del uso de energía procedente de fuentes renovables, define la biomasa como:

La fracción biodegradable de los productos, residuos y desechos de origen biológico procedentes de actividades agrarias, incluidas las sustancias de origen vegetal y animal, de la silvicultura y de las industrias conexas, incluidas la pesca y la acuicultura, así como la fracción biodegradable de los residuos, incluidos los industriales y municipales de origen biológico.

La biomasa puede ser utilizada como fuente de energía renovable y sostenible. Cuenta con un precio más estable que los combustibles fósiles y puede tener distintos orígenes como el animal o el vegetal, o ser obtenida a través de residuos producidos por la actividad del ser humano, así como por cultivos generados específicamente para el aprovechamiento energético.

Entre los usos que se le puede dar a la biomasa encontramos la producción de energía térmica y la generación de biogás o de biocombustibles, que se pueden obtener a través de diferentes tecnologías.

2. Principales ventajas de la biomasa 

La biomasa es una fuente de energía renovable y de  aprovechamiento que se genera continuamente a través de la actividad animal, vegetal, de residuos urbanos o industriales. Esto permite que exista una gran variedad de combustibles para generar biomasa, convirtiéndola en una fuente de energía casi inagotable.

En concreto, entre las ventajas de la biomasa de origen forestal, encontramos los siguientes beneficios a escala nacional:

• Favorece a la consecución de los objetivos de descarbonización: la biomasa no contribuye al efecto invernadero a diferencia de los combustibles fósiles. El CO2 que se libera tras su combustión forma parte de la atmósfera actual, ya que es el que absorben y emiten continuamente las plantas.
• Contribuye al modelo de economía circular: en España existe una gran densidad de bosques cuyos residuos forestales pueden ser aprovechados para la producción de energía sostenible. También ayuda a la limpieza de estos bosques y reduce el riesgo de incendios.
• Potencia la generación de puestos de trabajo locales: los proyectos de biomasa requieren distintos tipos de perfiles profesionales para realizar labores como la extracción y el transporte del combustible, así como los trabajos de construcción, operación y mantenimiento de la instalación.
• Disminuye la dependencia energética con el exterior: España cuenta con diferentes tipos de biocombustibles, entre los que destaca la biomasa forestal. Además, la gestión, el almacenamiento y la producción se pueden realizar en el mismo país, reduciendo la dependencia de las importaciones energéticas.

También existen otras ventajas de la biomasa a nivel industrial, como:  

• Neutralidad en carbono: esta solución permite una descarbonización efectiva de los activos energéticos de clientes industriales que consumen combustibles fósiles actualmente.
• Mitigación del riesgo de precio EUAS: contar con una solución energética neutra en emisiones de CO2 como la biomasa, permite a los clientes ahorrarse el coste de los derechos de emisión de CO2.
• Precios competitivos y con menor volatilidad: el precio de la materia prima es menor que el de algunos de los combustibles fósiles más empleados. Además, tiene una menor volatilidad en comparación con el fuel-oil y el gas natural. 
• Posibilidad de valorización de subproductos: a nivel tecnológico, existe un gran desarrollo de soluciones para valorizar la biomasa de residuos forestales, agrícolas o industriales mediante diferentes procesos termoquímicos como la combustión, gasificación, pirólisis, etc.

3. Factores a tener en cuenta de la biomasa

• A diferencia de los combustibles fósiles, los generados por biomasa pueden requerir de grandes espacios de almacenamiento, ya sea porque el tipo de materia tiene una densidad energética inferior, como la astilla forestal; o por su estacionalidad y dependencia de la cosecha anual, como el hueso de aceituna.
• El combustible utilizado en la central de biomasa estará condicionado por la distancia a la que se encuentre de la misma. Dado que la biomasa es un recurso muy local, el combustible utilizado se deberá encontrar en un radio de menos de 200km de la central, permitiendo reducir también las emisiones de CO2 producidas en el transporte.
• En el caso de la construcción de calderas de gran tamaño, se requerirá disponer de grandes espacios de terreno disponible para la instalación de la central de biomasa.
• Por último, es necesario tener en cuenta que los canales de distribución de biomasa no están tan extendidos como los de los combustibles fósiles.

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