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Logrando Ciudades Sostenibles: el impacto de las Redes de Calor y Frío en la climatización urbana

En un mundo donde la sostenibilidad es una prioridad urgente, las ciudades emergen como actores clave en la batalla contra el cambio climático. En este artículo, exploraremos el rol que desempeñan las ciudades en la transformación hacia la sostenibilidad y cómo ENGIE contribuye a esta causa mediante el desarrollo de redes de frío y calor para lograr una climatización urbana más sostenible.

Ciudades al frente de la transformación sostenible

Las ciudades ejercen una influencia significativa en la configuración de su futuro sostenible y concretamente las instituciones, administraciones públicas y ayuntamientos son actores fundamentales en la implementación de soluciones sostenibles como las redes de calor y frío en zonas urbanas. Estos organismos regulan la zonificación del uso del suelo, la eficiencia de la construcción, el transporte, la gestión de residuos y los servicios de agua permitiéndoles implementar políticas adaptadas a las necesidades locales. Aunque muchas ciudades están comprometidas con la lucha contra el cambio climático, la ejecución de planes con largo alcance sigue siendo un desafío.

Desafíos y tendencias en la climatización urbana actual

Tanto las ciudades grandes como las pequeñas enfrentan un desafío común: el crecimiento acelerado y la necesidad imperante de adoptar medidas para una climatización sostenible. Se prevé que la población urbana se duplique para el año 2030, impulsada por una mayor demanda de empleo, transporte, viviendas asequibles y recursos como energía, agua y gestión de residuos. Sin embargo, este crecimiento también conlleva costes significativos, desde la renovación de infraestructuras obsoletas hasta la necesidad de invertir en nuevos sistemas de climatización más eficientes y resistentes al cambio climático.

El camino hacia la climatización urbana sostenible: acciones clave para las ciudades

Estas acciones son fundamentales para lograr una climatización sostenible en las ciudades y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Con el compromiso de las autoridades locales, las empresas y la sociedad en su conjunto, las redes de calor y frío tienen el potencial de transformar la climatización urbana y contribuir a la construcción de ciudades más sostenibles y habitables.

Las redes de calor y frío son sistemas de distribución de energía térmica que suministran calefacción y refrigeración a múltiples edificios a través de una red de tuberías subterráneas. Estas redes pueden utilizar diversas fuentes de energía, como la biomasa, la geotermia, la energía solar térmica o la recuperación de calor residual de procesos industriales. Al aprovechar fuentes de energía renovable y excedentes locales, esta solución permite reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, aumentar la eficiencia energética y proporcionar una climatización más estable y fiable. 

En las ciudades, es importante que se lleven a cabo otras medidas como:

  • Fomento de la construcción sostenible, estableciendo requisitos de construcción que abarquen no solo la eficiencia energética, sino también la gestión del agua y los residuos. 
  • Promoción de fuentes de energía renovable, impulsando el uso de fuentes como la energía solar, la biomasa o la geotermia y facilitar la infraestructura local para su distribución. 
  • Aprovechar la recuperación de calor residual de procesos industriales o centros de datos, para alimentar las redes de calor y frío, aumentando así la eficiencia energética y reduciendo las emisiones de CO2. 
  • Implementación de regulaciones sostenibles, favorecidas por el impulso de las Administraciones públicas. 
  • Análisis y seguimiento de las diferentes soluciones de otras regiones y adopción de mejores prácticas.   
  • Creación de alianzas, fomentando la colaboración entre autoridades locales, industrias y comunidades para un enfoque compartido en la sostenibilidad. 

ENGIE acompaña a las ciudades en su ruta hacia la descarbonización

En este viaje hacia la sostenibilidad, ENGIE se erige como un catalizador clave. A través de su enfoque integral y soluciones innovadoras, trabajamos en estrecha colaboración con las ciudades, instituciones, administraciones y ayuntamientos, para abordar los desafíos más apremiantes. Desde la descarbonización de la energía hasta la gestión eficiente de recursos, en ENGIE contamos con la experiencia y las herramientas necesarias para guiar a las ciudades hacia un futuro más limpio y resiliente.

Un destacado ejemplo es Districlima en Barcelona, una red de calor y frío donde ENGIE es socio y operador. Este proyecto surge como una solución inteligente a la necesidad de la Administración de implementar un nuevo modelo de desarrollo urbano de alta calidad, con un compromiso con la sostenibilidad y la lucha contra el cambio climático. Cuenta ya con más de 25,5 Km de red, que abastecen a más de 180 edificios conectados, cubriendo una superficie climatizada de 1.700.000 metros cuadrados. Solo en ese 2023, Districlima logró ahorrar 32.533 toneladas de CO2, lo que equivale a retirar de la circulación diaria más de 47.000 vehículos. Este caso ilustra cómo las redes de calefacción y refrigeración pueden tener un impacto significativo en la reducción de la huella de carbono de una ciudad mediante una climatización sostenible.

En conclusión, el camino hacia la sostenibilidad urbana es desafiante, pero representa la apuesta para un crecimiento inteligente y próspero a largo plazo. Las ciudades, con su capacidad única para implementar políticas y transformaciones tangibles, están liderando el cambio, transformando los desafíos en soluciones, allanando el camino hacia un mañana más verde y sostenible para todos.